La Virgen Bien Aparecida es la patrona de la comunidad autónoma de Cantabria y de la diócesis de Santander. Su santuario se encuentra en el Alto de Marrón, en el municipio de Ampuero. La imagen es objeto de gran devoción desde su hallazgo en 1605. Te contamos su historia y tradición.
La Bien Aparecida, la Patrona de Cantabria
La historia nos remonta al 15 de Septiembre del año 1605, en este lugar existía una pequeña ermita dedicada a San Marcos, y parece ser que este mismo día unos niños del lugar que estaban pastoreando se encuentran con la talla de la Virgen en una de las ventanas de la ermita.
Sin saber cómo había llegado hasta allí aquella talla, los vecinos del lugar la depositaron con reverencia en el interior de la ermita. Nadie en el lugar podía determinar el origen y la historia de aquella talla diminuta (de unos 21 cm), que había aparecido de repente en aquella ventana, pero cada vez más devotos acudían a venerar aquella imagen.
También nos cuentan los historiadores que un poco antes de haber encontrado la imagen mariana en la antigua ermita de San Marcos, había otra talla muy similar en el Barrio de Marrón, próximo al lugar (la capilla existe en la actualidad). Esta talla corresponde a la Virgen del Mar…y aquí comienza otra historia que da origen al nombre de nuestra Patrona…
El Origen del nombre Bien Aparecida
La documentación histórica de la época, nos revela, que un lugareño llamado Rodrigo de Ungos, acudió a rezar y a dar las gracias a la Virgen del Mar por los favores que había recibido. Al ver el mal estado en que estaba la imagen decidió llevarla a restaurar y no se lo contó a nadie.
Los vecinos de Marrón, desconocedores de lo acontecido, buscaban su desaparecida imagen, y se encontró aquella otra talla en la ermita de San Marcos; lo cual ocasionó un fuerte conflicto, puesto que los vecinos de Marrón porfiaban en que esta última era la suya, y exigían su restitución.
Esta disputa dio paso a un pleito, que duró hasta que, el buen Rodrigo de Ungos, al devolver la Virgen de la Mar ya restaurada y percatarse del desaguisado que había generado su proceder, pidió perdón y aclaró que la imagen hallada en la ventana de la ermita de San Marcos era otra y distinta a la que él cogió para restaurar; por lo que los vecinos del entorno de la ermita pudieron afirmar lo que, sin duda alguna, quedó demostrado: que su imagen «no era robada, sino aparecida y… ¡bien aparecida!»; de ahí el nombre de la imagen.
De ermita a Santuario de La Virgen Bien Aparecida
El lugar se llenó de devotos y peregrinos que venían a venerar a la Virgen y la pequeña ermita se quedó pequeña. Es por este motivo que en el siglo XVIII, se erigió el actual Santuario sobre el lugar que ocupaba la antigua ermita.
Este nuevo templo fue construido con estilo barroco siguiendo los trazados de Juan de Rivas Puente.
En la pared lateral, junto a la puerta de la Capilla Penitencia y detrás de una pequeña verja de hierro, se halla el «VENTANUCO», como decimos en Cantabria, o la ventana de la ermita de San Marcos donde hallaron la imagen de la Virgen Bien Aparecida.
La Patrona de Cantabria es la Virgen Bien Aparecida
Aproximadamente unos trescientos años después de su hallazgo en aquella ventana de la antigua ermita de San Marcos, la diócesis decide declarar a la Virgen su patrona, y en el año 1905 se convierte en la Reina y Madre de la Montaña.
En el año 1955 se celebra su coronación canónica en Santander de la mano del obispo en aquel momento, D. José Eguinu y Trecu. Tiempo más tarde, al formarse la Comunidad Autónoma de Cantabria, el 15 de Septiembre de cada año se celebra el día de su Patrona La Virgen Bien Aparecida.
Cientos de personas acuden en este día, muchos caminando desde diferente lugares limítrofes , y rinden un homenaje a su Patrona, que sale en procesión y se celebra una misa solemne en su honor en la campa del Santuario, ofrenda floral y actos para festejar este gran día.
Su Himno
¡Oh Virgen querida, Bien Aparecida!
Reina nuestra eres, danos tu favor.
En la cumbre alzaste tu trono de gloria,
alza en nuestros pechos un trono de amor.
Tienes nuestro cielo para Ti doseles.
Tienes por alfombra campos de verdor:
Hacia a Ti subiendo miles de hijos fieles,
cantan como alondras cánticos de amor.
¡Oh Virgen querida, Bien Aparecida!
Oye si gemimos nuestro acerbo llanto.
Trueca los lamentos en triunfal clamor.
Oye complacida nuestro alegre canto,
si del pecho brotan himnos en tu honor.
Su Imagen
Los Cántabros celebramos este día con entusiasmo, y si estamos lejos de la tierruca, tenemos añoranza, y un pensamiento entrañable nos acerca al alto de la montaña en el Valle del Asón, rodeado de verdor por todas partes.
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